lunes, 1 de agosto de 2011

Meditación con el Buda de la Medicina



Para hacer esta meditación no se necesita iniciación. El Buda de la Medicina es alegría, dulzura, salud vertida sobre los practicantes que le llaman. En su mano izquierda lleva el cuenco que contiene el néctar para sanar las enfermedades del cuerpo, del alma, de la mente. La mano derecha sostiene en mudra un tallo de la planta "Arura" . 


“Si uno medita en el Buda de la Medicina, finalmente alcanzará la iluminación, y en el proceso, aumentará el poder de sanación para uno mismo y los demás. Y disminuirán las enfermedades físicas y mentales y el sufrimiento”.  Lama Tashi Namgyal.

Mantra: 
TEYATA OM
BEKANDSE
BEKANDSE MAHA
BEKANDSE 
RANDSA SAMUD
GATI SOHA


Hay muchas maneras de empezar la meditación, la importancia de esta reside en la conexión y la autenticidad en nuestro corazón al hacer la práctica. Se puede empezar con algunos pranayamas. Una luz que entra por la coronilla y llena el cuerpo. Visualizar al Buda lapislázuli. Recitar el mantra. Sentir como el agua del cuenco del Buda se derrama dentro sanando cada parte del cuerpo, como un manantial que alegremente limpia, reconforta, alivia, calma. El mantra gira alrededor del corazón (hacia la izquierda). El Buda de la Medicina está en frente generoso bañando toda dolencia. Y luego entra en el practicante y son uno mismo, y el mantra no se detiene, se opta por compartir esa curación a algún ser que lo necesita o terminar la sanación de uno mismo. Finalmente se agradece al Buda y se regresa.


domingo, 15 de mayo de 2011

"Después de haber visto una pequeña parte de la vida, y de morir rápidamente, los hombres se elevan y desaparecen como el humo, convencidos sólo de lo que cada uno ha conocido... ¿Quién puede decir que ha encontrado el todo?  EMPÉDOCLES, Sobre la naturaleza

En el principio

Foto y copilación de textos Mnêmosúnê


Cuando en lo alto el cielo no había sido nombrado,
no había sido llamada con un nombre abajo la tierra firme,
nada más había que el Apsu primordial, su progenitor,
y Mummu-Tiamat, la que parió a todos ellos,
mezcladas sus aguas como un solo cuerpo.

Enuma Elish


¡Belit-ili la diosa madre (diosa matriz o diosa de utero) está presente, dejad a la diosa madre crear al descendiente,y dejad al hombre llevar la carga de los dioses!
Las diosas madres (diosas matrices o diosas de útero) fueron montadas.
Él (Enki) mezcló la arcilla en presencia de Ella (Belit-ili, también Ninhursag, o Aruru, o Dingirmakh, o Ninhursaga, o Ninmah, o Nintu/Antu) que se mantuvo recitando un conjuro, mientras Enki, se quedaba y presenciaba todo, él le hizo recitar. Cuando ella hubo terminado su conjuro,  pellizcó catorce pedazos de arcilla, y puso dos juegos, siete pedazos a la derecha, siete a la izquierda. Entre ellos, ella dejó un ladrillo de fango. Cuando el décimo mes vino, Ella (la diosa del nacimiento) junto a su personal, abrió la matriz.
 ATRAHASIS



1:1En el principio creó D-os los cielos y la tierra. Bereshit bara Elohim et hashamayim ve'et ha'arets.
1:2 Y la tierra estaba vana  y vacía, y (había) oscuridad sobre la faz del abismo, y el espíritu de D-os se cernía  sobre la faz de las aguas . Veja'arets hayetah toju vavoju vejoshej al-peney tejom veruaj Elohim merajefet al-peney hamayim.
1:3 Y dijo D-os: Haya luz, y hubo luz. Vayomer Elohim yeji-or vayeji-or.
1:4 Y vio D-os la luz, que (era) buena; y separó D-os la luz de la oscuridad. Vayar Elohim et-ha'or ki-tov vayavdel Elohim beyn ha'or uveyn hajoshej.
1:5 Y llamó Dios a la luz, día, y a la oscuridad llamó noche. Y fue tarde y fue mañana: día uno. Vayikra Elohim la-or yom velachoshech kara laylah vayehi-erev vayehi-voker yom echad.
 Bereshit



1 En el principio creó Di-s el cielo y la tierra. 2 La tierra era caos y confusión y oscuridad por encima del abismo, y un viento de Di-s aleteaba por encima de las aguas. 3 Dijo Di-s: «Haya luz», y hubo luz.4 Vio Di-s que la luz estaba bien, y apartó Di-s la luz de la oscuridad; 5 y llamó Di-s a la luz «día», y a la oscuridad la llamó «noche». Y atardeció y amaneció: día primero.
Génesis 



1-1 Con treinta y dos senderos místicos de Sabiduría grabó Yah, el Señor de los Ejércitos, el Dios de Israel, Elhoim vivo, Rey del universo, EL Shaddai  Misericordioso y Clemente, Elevado y Exaltado, que mora en la Eternidad cuyo nombre es Santo- El es su sublime y santo-. Y creó Su universo con tres libros (Sepharim), con texto (Sepher), con número (Sephar) y con comunicación (Sippur).
Sepher Yetzirah


Cuando por primera vez se separaron el Cielo y la Tierra, las deidades que surgieron en el Altiplano del Cielo fueron estas: Ame-no-mi-nakanushi-no-kami, Taka-mi-musubi-no-kami y Kami-musubi-no-kami. Estas tres deidades nacieron independientes y sin jamás mostrar su forma. Luego, cuando la Tierra aún no se había solidificado por ser todavía joven y se asemejaba a una superficie de aceite flotante y a la deriva como una medusa, surgió una fuerza vital cual, como si se tratara de un  brote de juncos que crece en un pantano, acabó convirtiéndose en (el dios) Umashi-ashi-kabi-hikoji-no-kami y después en (el dios) Ameno-toko-tachi-nokami. Estas deidades nacieron independientes y sin jamás mostrar su forma.
Kojiki


"En el principio" [Gen. I: I], cuando la voluntad del Rey comenzó a hacerse, él grabó señales en la bóveda celeste [que lo rodeaba]. Desde el vacío más recóndito surgió una flama oscura, desde el misterio de EIn sof, el Infinito, como una bruma formándose en lo informe, encerrada en el anillo de esa esfera, ni blanco ni negro, ni rojo ni verde, de ningún color en absoluto. Sólo después de que esta flama comenzó a adoptar forma y dimensión, comenzó a producir colores radiantes. Desde el centro más profundo de la Clama emergió un pozo del cual salieron colores que se esparcieron encima de todo lo que estaba debajo, oculto en el misterioso escondite de Ein Sof. El pozo se abrió paso, pero no en el éter [de la esfera]. No pudo ser reconocido, hasta que un punto escondido y supremo brilló desde el fondo del impacto del último paso. Más allá de este punto fiada puede saberse. Así pues, recibe el nombre de reshit, principio, la primera palabra [de las diez] por medio de la cual el universo ha sido creado. 
   Zohar



Esta es la relación de como todo estaba en suspenso, todo en calma, en silencio; todo inmóvil, callado, y vacía la extensión del cielo. Esta es la primera relación, el primer discurso. No había todavía un hombre ni un animal, pájaros, peces, cangrejos, árboles, piedras, cuevas, barrancas, hierbas ni bosques: sólo el cielo existía. No se manifestaba la faz de la tierra. Sólo estaba el mar en calma y el cielo en toda su extensión. No había nada junto, que hiciera ruido, ni cosa alguna que se moviera, ni se agitara, ni hiciera ruido en el cielo. No había nada que estuviera en pie; solo el agua en reposo, el mar apacible, solo y tranquilo. No había nada todo de existencia. Solamente había inmovilidad y silencio en la oscuridad, en la noche. Sólo el creador, el Formador, Tepeu, Gucumatz, los progenitores, estaba en el agua rodeados de claridad. Estaban ocultos bajo plumas verdes y azules, por eso se les llama Gucumatz. De grandes sabios  de grandes pensadores es su naturaleza. De esta manera existía el cielo y también el corazón del cielo, que este es el nombre de Dios. Así contaban.

Popol Vuh









Los setenta y dos nombres

viernes, 29 de abril de 2011

Dejar ir lo que no será, dejar ir lo que no seré, lo que no daré; dejar ir lo que nunca existió. Quitar los pies de mi tumba.

jueves, 21 de abril de 2011

Jueves Santo

S.  Bendito sea nuestro Dios eternamente, ahora y siempre, y por los siglos de los siglos.
C.  Amén
S.n ¡Gloria a Ti, Dios nuestro, gloria a Ti!
      Rey celestial, Consolador, Espíritu de verdad, que estás en todo lugar llenándolo todo, tesoro de bienesy dador de vida ven a habitar en nosotros, purifícanos de toda mancha y salva, Tú que eres bueno, nuestras almas.
L.  Santo Dios, Santo Poderoso, Santo Inmortal: ten piedad de nosotros.
     Santo Dios, Santo Poderoso, Santo Inmortal: ten piedad de nosotros.
     Santo Dios, Santo Poderoso, Santo Inmortal: ten piedad de nosotros.

Así empieza el ritual del jueves santo de la Iglesia Ortodoxa Antioquena de la Ciudad de México. Luego de varias alavanzas, se leen los salmos 3, 38, 63, 88, 103, 143, una letanía por la paz, tropario (cantos litúrgicos), la lectura de los doce evangelios (San Juan 13:31-18:1, San Juan 18:1-28, San Mateo 26:57-75, San Juan 18:28-40; 19:1-16, San Mateo 27:3-32, San Marcos 15:16-32, San Mateo 27:33-54 -al terminar el septimo evangelio se lee el salmo 51-  San Lucas 23:32-49, San Juan 19:25-37, San Marcos 15:43-47, San Mateo 19:38-42, San Mateo 27:62-66) con sus antífonas y catísmas, bienaventuranzas, y a la mitad de la misa la procesión. Intercalando las lecturas y los cánticos en español y árabe.

Éramos los únicos jóvenes en la catedral, al arzobispo se le iluminó el rostro y nos dijo que le alegraba mucho vernos ahí. Las vacasiones empezarón días atrás, pero no quise viajar, quería estar en Pesaj (kabbalah) y en las misas del jueves, viernes y sábado santo; sin embargo, despúes de una efusiva invitación a Pesaj, nos desinvitaron diciendo que el cupo ya estaba al límite y a puertas cerradas uno camina hacia otra parte... jeje, tan bonitos los templos, las iglesias, los lugares sagrados, los espacios espirituales con puertas abiertas. Ayer, uno de mis hermanos me compartió la invitación que le habían hecho al  VAIROCANA ZEN MONASTERY México, y uno no debe nunca darle la espalda a ese tipo de invitaciones, estuvimos presentes en  las enseñanzas del maestro zen Miao Tsan. Habrá quienes me llamen incongruente, o descocada por andar en tan diferentes prácticas espirituales, pero mi brujula anda con todo y yo simplemente me dejo fluir. Y Dios está a donde vaya. Pues la misa de mañana me emociona mucho y aunque representa los funerales de Cristo, es mi ritual favorito junto con el sábado santo dentro de la fe ortodoxa. Y por ella no me he movido de la ciudad. Es quizás porque el rito  se conserva tal cual desde el primer concilio eucoménico, su teatralidad, sus cánticos en árabe, lo que me atraé.

Es la segunda vez que  al estar en la catedral ortodoxa, sin tener un propósito, sin pensarlo previamente, sin desearlo ocurre que percibo siempre a dos ángeles gigantes, no es durante todo el oficio, es en un momento en el que me pierdo en los rezos, o las imagenes, o los cánticos o cuando me suelto, que dos gigantes, como dos columnas muy fuertes me acompañan, aunque también tengo la sensación de que la iglesia caerán en ruinas, pero que esos dos ángeles permanecerán. No deseo, ni quiero que la catedral caiga, es sólo una sensación. Pero mi experiencia del jueves santo no fue sólo esto, quise conecatrme con los evangelios, y en mi cabeza hacía una recreación, tejiendo ficciones, sintiendo escalofríos al poner mis pies en los tiempos de Jesús, pero una mala lectura, u otra intervención sopresa, me desconectaban, que era muy bueno porque me daba cuenta que era mi imaginación la que trataba de hacer un enlace, cuando me soltaba, podía sentir las energías, el flujo divino. Dejé a un lado mis dudas, mis cuestionamiento sobre la veracidad de lo que narran los evangelios, creo que las dudas deben venir antes o después de una práctica y no cuando se está en ella.


Empecé mi día haciendo ayuno y lo termino muy agradecida.

Este vídeo es parte de la procesión:






Job 42: 1-6

Yo conozco que todo lo puedes, y que no hay pensamiento que se esconda de ti.
¿Quién es el que oscurece el consejo sin entendimiento? Por tanto, yo hablaba lo que entendía; cosas demasiado maravillosas para mí, que yo no comprendía.
Oye te ruego, y hablaré; te preguntaré, Tú me enseñarás.
De oídas te había oído; más ahora mis ojos te ven.
Por tanto, me aborrezco y me arrepiento en polvo y ceniza.

Job 7:13-21

Cuando digo: Me consolará mi lecho, mi cama atenuará mis quejas;
entonces me asustas con sueños, y me aterras con visiones.
Y así mi alma tuvo por mejor la estrangulación, y quiso la muerte más que mis huesos.
Abomino de mi vida; no he de vivir para siempre; dejame, pues, porque mis días son vanidad.
¿Qué es el hombre, para que lo engrandezcas, y para que pongas sobre él Tu corazón,
y lo visites todas las mañanas, y todos los momentos lo pruebes?
¿Hasta cuándo no apartarás tu mirada de mí, y no me soltarás siquiera hasta que trague saliva?
Si he pecado, ¿qué puedo hacerte a ti, oh Guarda de los hombres? ¿Por qué me pones por blanco tuyo, hasta convertirme en una carga para mí mismo?
¿Y, por qué no quitas mi rebelión y perdonas mi iniquidad?
Porque ahora dormiré en el polvo, y si me buscares de mañana, ya no existiré.